Consejos para el cuidado del motor

Consejos para el cuidado del motor

Para que tu motor tenga una mayor durabilidad será indispensable que le brindes unos cuidados básicos que permitan que el mismo esté en perfecto estado. Para conseguir los recambios que necesites te recomiendo desguacesgranada.com, porque allí encontrarás todas las piezas que necesitas a los precios más ajustados del mercado.

Sin embargo, debes cuidar el motor de una forma óptima para que este tenga una buena durabilidad y así evitar cualquier tipo de inconveniente con el mismo. Para ello he preparado este post, con la finalidad de que puedas saber exactamente cómo cuidar tu motor.

¿Cómo puedes cuidar el motor?

Cuidar el motor dependerá de varios factores y cuidados que le puedas dar para que esté en óptimas condiciones. Dentro de los principales cuidados a tener están:

Controla las RPM

Controlar las RPM es algo básico cuando hablamos del motor, porque dependiendo de estas estará trabajando más o menos. En todo caso, será indispensable que se tenga en consideración un límite de 2.500RPM para que el motor funcione de forma óptima.

Si las RPM suben por encima de este nivel se estará produciendo un desgaste innecesario en el motor. Por lo tanto, lo más recomendable es conducir con precaución y respetando este límite para evitar que el motor se esfuerce de forma innecesaria.

Realiza el cambio de aceite

El cambio de aceite es un mantenimiento que no se puede descuidar bajo ninguna circunstancia en tu coche. Esto debido a que así se mantendrá la correcta lubricación en el motor, y se evitará el desgaste entre las piezas por una mayor fricción.

En todo caso, este debe hacerse entre los 5.000 y 30.000 kilómetros dependiendo del modelo y año del coche. Sin embargo, si existe alguna fuga en el motor también puede requerir que se haga el cambio de aceite de forma prematura, por lo cual es importante que tengas esto en consideración.

Correa de distribución

La correa de distribución es una pieza fundamental en el motor, motivo por el cual debe estar siempre en perfecto estado para que se tengan los resultados deseados. Su cambio se debe realizar cada 100.000 kilómetros para evitar que se rompa en funcionamiento y cause averías.

Sin embargo, es una pieza bastante delicada que se debe estar revisando de forma periódica en búsqueda de desgastes. Esto permitirá detectar posibles daños por fugas de líquidos del motor, lo que garantizará que se puedan tener siempre unos resultados completamente óptimos y que se eviten daños en tu motor.